Solo necesito tu compañía. El
escuchar tu corazón latir, el verte respirar y saber que estás a mi lado me
hace sentir tan bien. Un sentimiento de plenitud, aún cuando no te estoy
besando.
Quiero detener el tiempo y tenerte
por siempre acá. No me importa el costo, no quiero dejar que me abandones. La
felicidad infinita me invade al tocar tus labios tan perfectos que te invitan a
mucho más.
Veo tus manos cerca y quiero que me
envuelvan y que el resto se vaya.
Pero el tiempo corre y el sol va
cayendo. La noche se acerca con el final que desconocía. No quiero soltarte. No
puedo dejar de recorrer tu rostro y tu cuerpo con mi mirada y las yemas de mis
dedos.
No puedo dejar de pensar en lo
hermoso que es estar así con vos.
Sigue cayendo el sol y aunque
existieron momentos incómodos, cada vez estamos más conectados.
Tenés que irte, la tarde terminó.
Llegó la noche que nos separa y que nunca nos volvió a juntar. No quería
soltarte.